FINALIZA EL PROGRAMA ELTUR 2023
Durante 6 meses, gracias a la subvención del Servicio Publico de Empleo de la Junta de Castilla y León para la realización de obras y servicios relacionados con actividades en el sector turístico y cultural, hemos podido contratar los Servicios de una Técnica para la puesta en marcha de un proyecto para la revalorización del patrimonio cultural de Santa Elena de Jamuz.
El trabajo desempeñado por Tere Fernández Alegre ha sido extraordinario. Os dejamos unas líneas escritas por ella relatando su experiencia:
Mi trabajo siempre ha sido impartir clases particulares. A mis 61 años, sin otra experiencia laboral que la docencia, me contrataron temporalmente en una administración local.
Entre mis tareas estaba impartir clases de apoyo escolar a niños/as de primaria, así como el desarrollo de actividades de envejecimiento activo. Las clases de apoyo no supusieron ninguna dificultad dada mi experiencia anterior. No así las actividades de envejecimiento, que aunque pudieran parecer muy similares al apoyo escolar, mi desconocimiento de la materia me llevó a buscar información de los aspectos a tener en cuenta en su desarrollo y ponerlos en práctica. A pesar del trabajo que me supuso su preparación y ejecución fue una de las tareas que más satisfacción me aportó por la confianza y la cercanía que me dieron “mis mayores”.
Otra de las tareas encomendada fue recibir y acompañar a los grupos de teatro que participaron en el Certamen. Nunca se me han dado bien “las relaciones publicas” y algo tan novedoso para mí, me quitaba el sueño. Era un reto que yo afrontaba con ansiedad y responsabilidad. Como todo lo desconocido al principio, no lo disfrutas, pero fue una maravillosa experiencia que repetiría sin dudarlo.
También dentro de mis funciones estaba la elaboración un trabajo sobre las bodegas del municipio. Gracias a la información aportada por personas del pueblo, a la recabada en libros y artículos y a la ayuda de mis compañeros se realizó un documento, sobre el que se desarrolló un tríptico y un video. En mi lista de cosas para hacer no estaba hacer un video. No me siento cómoda delante de una cámara, así que los nervios estuvieron presentes antes y durante.
A parte otras muchas tareas, que también forman parte de una experiencia tan positiva que se me ha hecho corta. Una experiencia a la que estuve a punto de renunciar por miedo. Miedo a la responsabilidad, miedo a no estar a la altura, miedo a salir de mi zona de confort.
Quiero animar a todas las personas que laboralmente somos “invisibles”, a no desfallecer, pues aunque tarde las oportunidades llegan.
Y lo más importante: GRACIAS a mis compañeros por la confianza, la ayuda y la cercanía con las que me han acogido haciéndome sentir uno de ellos.